Ecologistas de Extremadura plantea la necesidad urgente de cerrar la central nuclear de Almaraz ante el riesgo cada vez mayor para la seguridad ante los múltiples y reiterados incidentes, cuatro en los últimos cuatro meses. Desde esta asociación lamentan asimismo que el CSN no proporcione las oportunas explicaciones, y ni siquiera responda a las peticiones de información realizadas por Ecologistas tras el incidente del 18 de Julio.
En este sentido, y ante las afirmaciones del Consejero de Industria, Energía y Medio Ambiente de la Junta de Extremadura, los Ecologistas consideran que no es responsabilidad de los extremeños buscar alternativas al suministro, y consideran que nuestra región ha cumplido con creces, ya que durante decenios ha aportado a otras comunidades e incluso otros países más del 80% de la energía producida en la región, soportando los impactos y riesgos derivados de ello.
Ecologistas Extremadura cree que es a otras comunidades a las que les toca ahora realizar el esfuerzo, apostando decididamente por las energías renovables. Llaman la atención sobre las enormes posibilidades de desarrollo de energías renovables poco contaminantes como la solar en las miles de hectáreas de tejados de la comunidad de Madrid. Con un impacto ambiental insignificante, consideran que se podrían cubrir las necesidades energéticas y además se repartirían socialmente los beneficios económicos, aprovechando el interés de muchos ciudadanos y pequeñas empresas en invertir en este tipo de energía y obtener de este modo una fuente de ingresos.
En la misma línea, ante las declaraciones del Consejero sobre el plan energético regional, solicitan que en el mismo se incluya la energía solar fotovoltaica conectada a red en los cascos urbanos de Extremadura aprovechando tejados de viviendas, naves y edificios públicos, pues como ya se ha dicho genera un reducido impacto ambiental.
Manifestación contra la central nuclear
Al mismo tiempo, creen que se debe apostar más decididamente por el ahorro y la eficiencia energéticas, y solicitan que todas las viviendas de promoción pública y edificios de la administración que se construyan a partir de ahora se construyan según criterios bioclimáticos.
En todo caso, consideran que para los ciudadanos extremeños es del todo inaceptable que la central nuclear funcione más allá del horizonte de 2010, pues supone una amenaza constante y un handicap al desarrollo, al espantar muchas inversiones sostenibles de Extremadura.
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En este sentido, y ante las afirmaciones del Consejero de Industria, Energía y Medio Ambiente de la Junta de Extremadura, los Ecologistas consideran que no es responsabilidad de los extremeños buscar alternativas al suministro, y consideran que nuestra región ha cumplido con creces, ya que durante decenios ha aportado a otras comunidades e incluso otros países más del 80% de la energía producida en la región, soportando los impactos y riesgos derivados de ello.
Ecologistas Extremadura cree que es a otras comunidades a las que les toca ahora realizar el esfuerzo, apostando decididamente por las energías renovables. Llaman la atención sobre las enormes posibilidades de desarrollo de energías renovables poco contaminantes como la solar en las miles de hectáreas de tejados de la comunidad de Madrid. Con un impacto ambiental insignificante, consideran que se podrían cubrir las necesidades energéticas y además se repartirían socialmente los beneficios económicos, aprovechando el interés de muchos ciudadanos y pequeñas empresas en invertir en este tipo de energía y obtener de este modo una fuente de ingresos.
En la misma línea, ante las declaraciones del Consejero sobre el plan energético regional, solicitan que en el mismo se incluya la energía solar fotovoltaica conectada a red en los cascos urbanos de Extremadura aprovechando tejados de viviendas, naves y edificios públicos, pues como ya se ha dicho genera un reducido impacto ambiental.
Al mismo tiempo, creen que se debe apostar más decididamente por el ahorro y la eficiencia energéticas, y solicitan que todas las viviendas de promoción pública y edificios de la administración que se construyan a partir de ahora se construyan según criterios bioclimáticos.
En todo caso, consideran que para los ciudadanos extremeños es del todo inaceptable que la central nuclear funcione más allá del horizonte de 2010, pues supone una amenaza constante y un handicap al desarrollo, al espantar muchas inversiones sostenibles de Extremadura.
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Que cierren ya la cafetera.
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