La asociación Ecologistas Extremadura ha alegado por escrito los motivos por los que, a su juicio, debe descartarse la candidatura del municipio extremeño de Albalá como sede del ATC.
Dichas alegaciones se basan fundamentalmente en la falta de debate ciudadano y de transparencia en las negociaciones del Gobierno y ENRESA con el Ayuntamiento de Albalá. La presentación de la candidatura se llevó a cabo de forma precipitada y vulnerando, en opinión de los ecologistas, los derechos de acceso a la información y a la participación pública en materia de medio ambiente que recoge en convenido de Aarhus del que España es parte signataria.
Otra de las alegaciones se fundamenta en que el ATC traerá más perjuicios que beneficios a la comarca, la cual perdería población y vería perjudicado su tejido económico, que gira en torno al turismo y a una industria agroalimentaria basada en la calidad y en las denominaciones de origen.
Asimismo, la ubicación del cementerio nuclear en Albalá sería altamente perjudicial para las diferentes áreas protegidas –LIC Y ZEPA- que existen en el entorno, como son la Sierra de San Pedro y los Llanos de Cáceres y Sierra de Fuentes.
Por último, los ecologistas recuerdan que la gestión de los residuos radiactivos de alta actividad es actualmente un problema no resuelto en ningún país del mundo –el Plutonio-239, por ejemplo, tiene una vida media de 24.000 años-, y que por ese motivo no procede decidir sobre el almacenamiento de los residuos de alta actividad hasta que no exista un calendario y un plan de cierre de todas las centrales nucleares de España.
Dichas alegaciones se basan fundamentalmente en la falta de debate ciudadano y de transparencia en las negociaciones del Gobierno y ENRESA con el Ayuntamiento de Albalá. La presentación de la candidatura se llevó a cabo de forma precipitada y vulnerando, en opinión de los ecologistas, los derechos de acceso a la información y a la participación pública en materia de medio ambiente que recoge en convenido de Aarhus del que España es parte signataria.
Otra de las alegaciones se fundamenta en que el ATC traerá más perjuicios que beneficios a la comarca, la cual perdería población y vería perjudicado su tejido económico, que gira en torno al turismo y a una industria agroalimentaria basada en la calidad y en las denominaciones de origen.
Asimismo, la ubicación del cementerio nuclear en Albalá sería altamente perjudicial para las diferentes áreas protegidas –LIC Y ZEPA- que existen en el entorno, como son la Sierra de San Pedro y los Llanos de Cáceres y Sierra de Fuentes.
Por último, los ecologistas recuerdan que la gestión de los residuos radiactivos de alta actividad es actualmente un problema no resuelto en ningún país del mundo –el Plutonio-239, por ejemplo, tiene una vida media de 24.000 años-, y que por ese motivo no procede decidir sobre el almacenamiento de los residuos de alta actividad hasta que no exista un calendario y un plan de cierre de todas las centrales nucleares de España.
2 comentarios:
Seria bueno que la comarca de Montanchez y La trujillana sur se declarasen paisaje natural protejido abarcando los terrenos y sierras comprendidos en la cuenca media-alta del rio Ayuela,las cuencas altas de los rios Salor Tamuja con su afluente Gibranzos,rio Burdalo,Aljucen y Lacara
Muy buen post, estoy casi 100% de acuerdo contigo :)
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