El mirador del espectacular peñón de Puerto Peña, un lugar emblemático en Extremadura, protegido por dos figuras jurídicas de la Unión Europea (ZEPA y ZEC) y por otra de la Junta de Extremadura (ZIR Embalse de Orellana y Sierra de Pela), emplazado aguas abajo de la presa García de Sola sobre el Guadiana, se encuentra en un estado de dejadez preocupante, especialmente por las basuras dispersas por sus alrededores, incluyendo a zonas con gran valor ambiental por la calidad de su cobertura vegetal.
Tratándose este cortado rocoso sin ninguna duda de uno de los entornos paisajísticos más destacados de Extremadura, y por ende, de un importante reclamo turístico para esta zona de la región, Ecologistas Extremadura ha solicitado al Ayuntamiento de Talarrubias, a la Consejería para la transición ecológica y Sostenibilidad y a la Consejera de Agricultura, Desarrollo Rural, Población y Territorio:
La limpieza urgente del entorno.
La retirada de los contenedores para basura, que animan a los visitantes a depositarla allí como si se eliminara con asiduidad, cuando realmente no hay un servicio habitual de recogida en esta zona natural.
Que se establezca un sistema de vigilancia, así como una cartelería que indique la prohibición del depósito de basuras en todo el entorno de este espacio protegido, sancionando oportunamente a quienes pese a todo no respetan la naturaleza extremeña.
Ecologistas Extremadura estima que es necesario apostar decididamente por la educación ambiental de la población en general, no solo destinada al público infantil y para los jóvenes. Además, considera que la Junta de Extremadura debe prestar más atención a lugares a espacios de gran valor como este de Puerto Peña, por ejemplo, ya que sirven para proyectar nuestra imagen al exterior a través de sus visitantes.