El 16 de Septiembre de 2022 se celebró una reunión del Consejo Extremeño de Caza con aproximadamente 20 asistentes, representantes de empresas de la administración y de colectivos como la Federación de Caza y asociaciones ecologistas, que estuvieran presentes con un representante de las asociaciones más un invitado de SEO/Birdlife.
En el Consejo, en el orden del día, figuraban planteamientos como el control de depredadores a través de una modificación de la orden de 4 de Diciembre de 2013, la organizaciones ambientales a través de su representante manifestaron su oposición a este control de especies tan importantes para el equilibrio de los ecosistemas, pero les parece aún peor que se regulara que la acreditación para este control la impartiera la Federación Extremeña de Caza, ya que las condiciones propuestas indicaban que debería ser una Federación y una serie de requisitos que no pueden cumplir empresas o científicos especialistas en depredadores, consideran que la citada Federación no debe dedicarse a estas funciones, ni está capacitada para desarrollar esta labor por estar especialmente interesada en acabar con ellos, especialmente en aquellos cotos que sueltan animales de granjas cinegéticas; el representante ecologista planteó que primero la Junta tendría que disponer de un análisis poblacional de las distintas especies de depredadores para poder llevar a cabo este control y que no es coherente dejar esta decisión en manos de entidades como la Federación de Caza. Hay que decir al respecto que en la orden no se menciona titulaciones universitarias adecuadas para hacer el análisis poblacional de las especies de depredadores. Así este trabajo técnico puede caer en manos tanto de un maestro de primaria, como de una diplomada en económicas o un licenciado en Filosofía. Aunque representantes de la Junta de Extremadura defendieron que el control de depredadores nunca se haría sobre especies protegidas los ecologistas plantearon que algunas poblaciones de los depredadores, habitualmente bajo control poblacional están sobrevaloradas, ya que no disponen ni la administración ni los interesados de análisis rigurosos científicamente, como así lo reconocieron.
En el orden del día se habló también de la presentación de la Estrategia Regional de Caza, que pretende llevarse a cabo mediante un convenio de la Junta de Extremadura con la Federación de Caza Fedexcaza. En este punto las asociaciones ecologistas se quejaron de no haberse tenido en cuenta a una diversidad de entidades ciudadanas que deberían tener voz en este aspecto. La Junta de Extremadura reconoció que este es un trabajo que ha surgido a petición de la Federación Regional de Caza y que ellos simplemente han seguido su petición. En ese aspecto parecía que quien dirigirán los trabajos será la Federación de cazadores, mientras que la Junta consiente con todo lo que plantean incluso llegaron a decir que permitirán a los ecologistas comprobar los trabajos, como si de ellos tuviera que depender este tipo de decisiones. Nuevamente hablaron de las titulaciones que trabajarían en este tipo de estudio mencionando geógrafos, ingeniería e incluso economistas, sin llegar a mencionar ni a ambientalistas ni a biólogos o biólogas, ante lo cual nuevamente las asociaciones ecologistas mostraron su rechazo.
En el orden del día además también se habló del plan de recuperación de la tórtola Europea, que curiosamente también lo lleva a cabo una fundación relacionada con la Federación de Caza, como es Artemisan. En ella se afirmaron cuestiones que las ongs ambientales ponen en duda, como que la población de tórtola europea que se ha obtenido en los trabajos desarrollados tiene un valor mínimo de 183.000 ejemplares en la región, o 14 tórtolas por cada 100 hectáreas. Uno de los puntos conflictivos del trabajo era en la fase experimental, sobre lo que los ecologistas expresaron que es una incoherencia mayúscula matar animales en un trabajo dedicado a incrementar sus poblaciones. Las explicaciones científicas, entre comillas, fueron realmente ininteligibles tal es así que se pidió algún documento donde poder analizar de qué tipo de experimento se trataba y qué objetivos perseguían con él. Se comentó que se había publicado en la revista científica "animals", y que enviaría la metodología y el trabajo técnico para poder ser analizado con detenimiento.
Las organizaciones ambientales lamentan que se pese a su petición expresa, presentada por escrito antes de la última reunión del Consejo Extremeño de caza, se haya desarrollado la media veda en una condiciones de extrema sequía, que ha creado gran vulnerabilidad para las especies cazadas y han vuelto a pedir que se respete más la parada biológica en primavera, dejando de dar tantos permisos y se deje de abrir la caza de cada vez más especies fuera de la temporada de caza general, que comienza en Octubre y acaba en Enero.
Para Ecologistas Extremadura le resulta escandalosa la cantidad de subvenciones que se dan a Fedexcaza y que esta realice labores que debería llevar a cabo la administración, para garantizar el rigor y la independencia necesarias, además del mérito y capacidad que han demostrado los funcionarios, pero es que además tampoco se da opciones a otras empresas o asociaciones, que no estén directamente vinculadas con Fedexcaza, como es el caso de la Fundación Artemisan, ni se piden las titulaciones que estarían acordes con estas labores, que deben tener rigor científico para que puedan ser sostenibles.
Las organizaciones han vuelto a manifestar su oposición a que se maten ciervos en la berrea, que se está desarrollando en la actualidad, pero la Junta de Extremadura simplemente ha dicho que toma nota pero sin dar información al respecto, ni su posición, esperan que los recechos se realicen a partir de ahora en la temporada de caza, cuando ya ha acabado esta fase tan importante para la selección natural del ciervo y que además atrae cada vez a más turistas para observarla y oirla.
